Preparando la casita
Mi mamá siempre ha usado la frase “Preparar la casita” para referirse al momento en que nuestro cuerpo empieza a desintoxicarse para esperar la llegada de un bebé, es una buena forma de explicar lo que debemos hacer al interior y exterior de nuestro ambiente para este preciado momento.
Yo no pude tomarla literal, cuando decidimos iniciar nuestra búsqueda de bebé no pasó mucho tiempo antes de hacerse realidad, sucedió tan rápido que no alcanzamos a hacer los exámenes previos, tanto para Fiona como para mí.
En cuanto a Fiona ella venía de un centro de adopción confiable, donde nos explicaron que a todos los gatitos bebés les aplican un tratamiento preventivo contra la toxoplasmosis (el miedo más común en el embarazo si se convive con gatos), por lo que solo fue necesario seguir tomando medidas lógicas para no tener contratiempos con el bebé en formación: mantener arenera limpia, no compartir platos, no tocar con las manos ni comer el popó de Fiona (Bastante lógico!!!).
En mi caso había un antecedente de toxoplasmosis en la familia, mi mamá la adquirió de pequeña y sus embarazos fueron de cuidado por eso ella tenía temor a que Fiona estuviera en casa. Así que sin perder más tiempo inicié controles tan pronto nos enteramos, dando a conocer el historial y situación actual (gata en casa) a mi ginecóloga, quien nos orientó y apoyó excepcionalmente.
En este periodo es importante antes de dejarse llevar por miedos y mitos tener una correcta asesoría, yo por ejemplo quiero resaltar dos consejos médicos que me dieron tranquilidad y espero sean de utilidad para quienes están en la misma situación:
- Cuando le conté a mi ginecóloga que había una gata en casa me respondió: “Tranquila no tienes que sacar la gata, solo sigue las medidas de sanidad. ¿Cómo crees que hacen las mujeres que son veterinarias? Ellas no dejan su profesión cuando tienen hijos”.
- Cuando nos entrevistamos con un candidato a pediatra y le contamos de Fiona contestó: “Hace algunos años te hubiera dicho que había que sacar al animalito, pero hoy día no, ellos hacen parte de la familia. El bebé va a adquirir defensas a través tuyo, y si cuando nazca presenta alergias pues se las tratamos a su debido tiempo”. Después de esa respuesta por supuesto lo escogimos como el pediatra de nuestra hija.